TURISMO ORNITOLÓGICO
Mont-rebei y la Terreta
Bajando de altitud, ya con cimas por debajo de los 1.700 m, la sierra del Montsec es un gran macizo del Prepirineo central. Aunque el macizo está dividido en dos grandes áreas por el desfiladero de Terradets, el Montsec de Rúbies, en el este, y el Montsec de Ares, en el oeste, todo el conjunto se considera una sola unidad. Administrativamente su límite occidental es el río Noguera Ribagorçana, aunque el espacio natural es compartido en realidad con la Litera y la Ribagorza de la Franja de Ponent.
Dentro de esta región elegimos el desfiladero de Mont-rebei y la Terreta para la observación de pájaros. Este paraje, con paredes en caída vertical de quinientos metros sobre el río, es, también, uno de los enclaves con mayor valor paisajístico. El desfiladero es un inmenso cañón cortado por el paso del río Noguera Ribagorçana. Las paredes verticales acaban al sur en un espacio más amplio de despeñaderos y vegetación mediterránea.
Recorrer el desfiladero por un camino en la misma roca permite acceder a los riscos donde viven las aves rupícolas más características de los ambientes pirenaicos, como las rapaces, la chova piquirroja, el avión roquero, el treparriscos o el roquero rojo. Sin embargo, a diferencia de otros lugares la ruta por el desfiladero de Mont-rebei forzosamente debe hacerse a pie. Se trata de un camino estrecho excavado en la roca.
Como decíamos, estos cañones dan paso a un amplio espacio de vegetación mayoritariamente mediterránea, llamado la Terreta, dentro del municipio de Tremp en el Pallars Jussà. Con más de 300 km2 y una treintena de pequeños núcleos rurales, se trata de una región idónea para mirar desde los buitres a la mayor parte de las currucas más nuestras junto al mosquitero papialbo, el roquero solitario o el alcaudón coroniblanco. Porque aquí los ambientes mediterráneos se entrelazan con robledales, bosques de pino silvestre y en la solana los encinares.
Para saber cómo visitar este territorio lo más adecuado es dirigirse o acercarse a la Masieta de Mont-rebei de la Fundación Catalunya-La Pedrera, en Sant Esteve de la Sarga. O bien contratar la excelente oferta de guías de turismo ornitológico y acechos fotográficos para aficionados a los pájaros.