Ruta el Camino del Agua
Si pudiéramos volar como un pájaro en migración por los cuatro puntos cardinales de la comarca de la Alta Ribagorça, lo que más nos sorprendería sería la gran cantidad de lagos, forjados durante los últimos miles de años por una evolución natural pausada y sabia, que contrasta sutilmente con la petulancia de los embalses y las presas que, de la mano del hombre, se han construido durante los pasados cincuenta años.
El agua es, pues, el elemento natural por excelencia del entramado paisajístico ribagorzano. Aguas que nacen de las copiosas precipitaciones que durante las cuatro estaciones del año caen en la comarca. Aguas que inician su viaje hacia el Mediterráneo desde los circos glaciares que se esconden en las cabeceras de los principales valles. Aguas que se transforman en Nogueras bravos, que viajan con ímpetu en primavera y, por el contrario, pueden llegar a helarse en invierno. Aguas de nieve y de lluvia, donde la vida nace, crece, se reproduce y muere con absoluta naturalidad. Es su destino.
Y son estas aguas las que definen la red de senderos que atraviesan la comarca de norte a sur y de este a oeste. Caminos ancestrales, caminos de herradura, caminos reales, caminos ganaderos, caminos entre montañas que, por encima de todo, nos deben permitir vivir nuevas sensaciones, mientras descubrimos con entusiasmo la naturaleza salvaje de estos valles pirenaicos.
El Camino del Agua cuenta con una longitud de 26 km, una anchura media de 1,5 m y un desnivel de 650 m. Se trata de un itinerario que discurre por distintos tramos de antiguos caminos tradicionales y cañadas, próximos a los principales ríos de la comarca, uniendo la cola del embalse de Escales y el monasterio de Lavaix, en El Pont de Suert, con el balneario de Caldes de Boí. Por lo tanto, se trata de uno de los ejes principales de la red de caminos existente en la comarca.
CONSEJOS PRÁCTICOS
- Informaos antes de realizar cualquier excursión o travesía.
- Llevad el equipo adecuado –botas de montaña, forro polar, impermeable, gorra, gafas de sol, botiquín, crema solar–.
- La meteorología puede cambiar bruscamente en la montaña. Sed prudentes y consultad las previsiones de riesgo de aludes.
- Muchas zonas de montaña no tienen cobertura telefónica.
- Medid bien las fuerzas. ¡Pensad en la vuelta!
- Hay que respetar los animales, las plantas y los rebaños de vacas, caballos y ovejas que pastan. ¡Llevad atados los perros!
- No abandonéis ni escondáis la basura. Depositadla en los contenedores.
- Todos somos gestores activos y responsables del patrimonio natural. Respetad las normativas específicas de cada lugar, así como la de los espacios naturales protegidos. ¡Por el bien de todos!
- Los pueblos son depositarios de cultura, arte y tradiciones. ¡Descubridlos!