Calidad, cercanía y autenticidad: tres palabras que definen la gastronomía leridana. Desde los potentes platos de montaña, donde las carnes de ternera y cordero, los embutidos, los quesos y las setas marcan la diferencia, hasta la cocina de las comarcas del llano, con la carne de cerdo, la fruta dulce, los productos de la huerta y el aceite de oliva como elementos más emblemáticos, el territorio ofrece durante el otoño un rico catálogo de elaboraciones culinarias. Elaboraciones que son fruto tanto de la sabiduría popular como de la experiencia y la creatividad de los cocineros leridanos. El aceite de oliva virgen extra, considerado uno de los mejores del mundo, y los excelentes vinos producidos por las 36 bodegas de la D. O. Costers del Segre son también productos esenciales en este panorama gastronómico, hasta el punto de que han dado pie a dos movimientos muy consolidados, el oleoturismo y el enoturismo, que mueven cada año a miles de visitantes. Las jornadas, las fiestas y las ferias gastronómicas consolidan el prestigio que han alcanzado las comarcas de Lleida como destino privilegiado para los amantes de la buena cocina. 

— Enoturismo
— Oleoturismo
— Ferias gastronómicas
— Gastronomía