BAÑOS DE BOSQUE
En la atmósfera íntima del bosque de Pallerols
Rodeado de altas montañas, el Alt Urgell es una comarca eminentemente montañosa dominada por el Pirineo y el Prepirineo. El Salòria, con 2.783 metros, y el Monturull, con 2.761, son las cimas más altas y forman parte del Pirineo axial. En la sierra del Cadí aparece la Canal Baridana como cima culminante (2.647 m). Parte de la comarca se encuentra dentro del Parque Natural del Alt Pirineu, el más extenso de Cataluña, muy rico en variedad biológica tanto por su fauna como por su flora. Son uno de sus valores esenciales los extensos bosques de coníferas (pinares de pino negro, pino silvestre y abetos), los robledales, los abedules y los fresnedos..., que sorprenden por todas partes por el verdor y la grandiosidad. Los paisajes alpinos se combinan con los bosques, pastos y prados de siega de los valles, formando un mosaico muy diverso y atractivo. Desde la alta montaña, con dominio de la vegetación boreoalpina, a la media y baja montaña, dominadas por el roble pubescente, el carrascal y otras comunidades de interés donde aparecen bosques caducifolios mixtos, de abedules, entre otros, sin olvidar los sistemas acuáticos, la comarca es en sí misma un inmenso bosque que ofrece un abanico inacabable de espacios donde practicar baños de bosque.
En esta ocasión, la zona propuesta se localiza en el pequeño valle de Sant Miquel, junto a Sant Joan de l’Erm, situado en el sector más occidental del término de Montferrer i Castellbò. Hay que dirigirse, pues, a Sant Joan de l’Erm y una vez allí se puede estacionar en el parking del refugio de la Basseta. Esta localización es el punto de salida de numerosos itinerarios de dificultad variable, incluso uno adaptado para personas con movilidad reducida muy recomendable, y hay que decir que cualquiera de ellos es una buena opción para darse un baño de bosque, o combinar la actividad con alguna de las muchas opciones de senderismo. También hay una caseta de información del Parque y varios paneles informativos con información de los itinerarios y de la zona. Cabe recordar que Sant Joan de l’Erm es una estación de esquí nórdico (de hecho, es pionera en este deporte), ubicada en el Parque Natural del Alt Pirineu y conocida por los bosques centenarios del valle de Santa Magdalena. El refugio de la Basseta, de titularidad pública y con equipamientos para alojarse, se halla situado a 1.700 metros y representa la base de la estación. Entre los paneles informativos que comentábamos se encuentran también los de la red de recorridos de esquí de fondo, que se adentran entre frondosos bosques de pino silvestre, pino negro y abeto.
Al valle de Sant Miquel se puede llegar en coche o ir a pie. Andando hay unos 3,5 kilómetros desde la curva donde se encuentra la fuente, justo antes de llegar al refugio de la Basseta. En ambos casos, hay que tomar la pista forestal que sale a la izquierda, que sube hacia el santuario de Sant Joan de l’Erm nuevo. Para ir en coche, una vez en el santuario hay que tomar la pista que queda a mano izquierda y que baja hacia el collado de Leix. Se sigue bajando hasta el collado de Leix y una vez allí nos encontraremos en un punto de confluencia de varias pistas. Hay que seguir la señalización vertical en dirección a la Casa Forestal de Pallerols y el valle de Sant Miquel, que sale hacia la derecha. En la misma dirección se halla el área de recreo del Bosque de Pallerols. En caso de querer ir a pie, en vez de dirigirse hacia el santuario de Sant Joan de l’Erm hay que seguir las indicaciones hacia el collado de Leix y después siempre la dirección de la Casa Forestal de Pallerols y el área de recreo de Pallerols. Recomendamos prestar atención todo el rato a las indicaciones, ya que hay muchos cruces y bifurcaciones hasta llegar a la Casa Forestal/área de recreo de Pallerols. Cabe decir que también se puede llegar por Canturri, por la pista forestal que lleva a Sant Joan de l’Erm nuevo. Este inmenso caserón, enclavado entre el refugio de la Basseta y el refugio de las Comes de Rubió, se encuentra cerrado actualmente, pero existe un proyecto interesante de convertirlo en centro de investigación. A 200 metros, en el área de recreo hay una pequeña caseta que puede servir de cobijo. Una última advertencia es que hay pistas donde la circulación de todo tipo de vehículos está prohibida desde finales de noviembre hasta finales de mayo; vale la pena consultar su estado según la época del año en la que se desee ir en la web del Parque parcsnaturals.gencat.cat/altpirineu.
El espacio para la práctica del baño de bosque
Una vez llegados al área de recreo hay que ir por la pista hacia el norte, donde veremos un cartel que prohíbe la circulación motorizada excepto a vecinos y servicios. Hay que cruzar la pasarela, sobre las aguas del torrente de Sant Miquel, y situarse en el camino de la izquierda. El torrente nos quedará a nuestra mano derecha. El paseo consiste en una ruta circular que, desde el área de recreo de Pallerols, continúa hacia el Serrat de la Costa (un poco más arriba de la Font de l’Orri), sigue hacia el Pla de Berbegués y desde aquí cierra el círculo el área de recreo. El recorrido está señalizado con marcas amarillas y tiene una distancia de 3,1 kilómetros, un desnivel suave de 90 m y está pensado para hacerlo caminando pausadamente en 1 hora.
Desde el inicio nos encontraremos inmersos en este oasis de paz y exuberancia que parece talmente el paraíso. No en vano, este bosque se conoce popularmente como el Canadá de Cataluña. El agua cristalina del torrente, el canto de los pájaros, el verde intenso de la vegetación y su explosión de colores del otoño, los aromas de las plantas y flores, el aire puro e impecable, nubes dibujando formas en el cielo azulísimo, rebaños de vacas y caballos ufanos..., todo invita a contemplar el espacio y potenciar los sentidos para ser más conscientes de todos los elementos presentes que nos rodean.
A lo largo del paseo nos acompañará principalmente el pino silvestre (Pinus silvestris), que en estas alturas es fácil de confundir con el pino negro (Pinus uncinata). A medida que avancemos, si nos fijamos en las ramas de los pinos será fácil ver cómo cuelgan unas melenas de color verde grisáceo muy curiosas; se trata de un liquen comúnmente conocido como barba de capuchino (Usnea barbata) y que es señal de la pureza del aire y la buena conservación del bosque. El otro liquen que frecuenta el lugar es la escarola del Pirineo, característico por su forma rizada. El ambiente húmedo propicia que proliferen muchas especies vegetales y que el paraje quede cubierto por un mosaico variado, que incluye también ejemplares de árboles muertos, caídos o en pie, importantísimos para las relaciones tróficas y buenos indicadores de bosque maduro. Cabe destacar que es hábitat de murciélagos forestales protegidos, como el murciélago de bosque (Barbastella barbastellus), el bigotudo (Myotis mystacinus) y el orejudo dorado (Plecotus auritus), que se refugian en los hoyos y las grietas de los troncos de los árboles.
Si inhalamos profundamente y nos concentramos en el sentido del olfato de manera receptiva podemos recibir con mayor intensidad las moléculas aromáticas. Sin la costumbre de oler quizá recibamos los olores como un chorro, mezclados, pero a medida que los vayamos desgranando podremos captar mejor las diferencias. Los olores se pueden encontrar en las plantas enteras o en cualquiera de las partes (raíces, tallos, hojas, flores, frutos, semillas) y están totalmente ligados a las estaciones del año. El olor terroso, a hongo, nos trasladará al otoño, así como el de las flores nos transporta a la primavera. Experimentar con el olfato es regalarnos un concierto de olores, a nosotros y a uno de nuestros sentidos más olvidados.
Mapa guía del valle de Santa Magdalena
L’APP “Alt Pirineo, Déjate Guiar” es una aplicación con rutas detalladas del parque, geolocalización GPS, zonas de recreo, detalles de la flora y la fauna, etc.
